¿Qué?

Regresé de los veracruces en el 2009 y me encontré con que los transbúses todavía son verdes y no vuelan. Ningún carro vuela, nada en las calles es plateado y no hay amenazas de asteroides gigantes que sólo los de Schlumberger podrían destruir.

Regreso y no hay nada novedoso. He dejado de ir a correr y unas lonjas sexies se asoman sobre mis pantalones, me salió un pinchísimo grano en la espalda que duele horrores y no tengo novio... salvo aquel lindo, travieso y cachondísimo encuentro cercano de casi finales de año... que por cierto quisiera repetir, pero cada vez está más cabrón. Y lo odio por encantador y dificilote.

Lo único chistosón que me pasó en año nuevo, fue que tomé un taxi y el chofer estaba medio chavo, ahí dos-dos y no dejaba de mirarme... yo traía lentes obscuros y el güey quizás creía que no le estaba viendo sus sucias intenciones.

Lo más cruel de mi parte fue haberle sonreído cuando volteé la cara al frente, y digo "cruel" porque de plano el cabrón andaba muy, muy jarioso.

Cuando se bajó el pasajero de adelante, el chofer me preguntó:

-¿No quieres pasarte para enfrente?

Y yo:

-No y no vuelvo a sonreírle a un extraño jamás.

Sigo siendo lépera, sigo siendo contestona, sigo siendo eroti-porno, mi cuarto sigue siendo un desmadre, sigo escuchando música desde un samsung oldie y me sigo bañando con jabón Nórdiko.

Besos con saliva del año pasado. :D